


El 30 de julio, declarado Día Mundial contra la Trata de Personas por la Asamblea General de la ONU en 2013, busca concienciar a la población y a los gobiernos sobre la grave problemática de la trata de personas. Este año, el tema elegido por Naciones Unidas es: "No podemos dejar a ningún niño o niña atrás en la lucha contra la trata". Según el Informe Mundial sobre la Trata de Personas de la UNODC, uno de cada tres víctimas de trata es un niño, y la exposición a Internet sin la protección adecuada agrava esta situación. Este delito, considerado una forma moderna de esclavitud, priva a las personas de su libertad y derechos, sometiéndolas a explotación sexual y laboral, trabajos forzados y otras formas de abuso.
En respuesta a esta crisis, la ONU ha lanzado la campaña "Corazón Azul", que simboliza la tristeza de las víctimas y la insensibilidad de quienes las explotan. Esta iniciativa, creada en 2008, busca sensibilizar al público y promover la erradicación de la trata de personas mediante la participación activa de la comunidad global. Además, destaca la importancia de generar espacios de debate y solidaridad con las víctimas, utilizando el símbolo del corazón azul como una manifestación de apoyo. La lucha contra la trata de personas requiere un esfuerzo coordinado de los Estados y la participación de todos los individuos para combatir esta forma de esclavitud del siglo XXI.





