¿Por qué se conmemora el Día Nacional del Donante Voluntario de Sangre?
Este sábado 9 de noviembre, Argentina celebra el Día Nacional del Donante Voluntario de Sangre en conmemoración de un hito histórico en la medicina mundial.
Fue en 1914 cuando el médico e investigador Luis Agote logró realizar la primera transfusión de sangre anticoagulada en el país y en el mundo. Este avance marcó un antes y un después en la historia médica, ya que durante siglos se había intentado sin éxito realizar transfusiones seguras y efectivas.
El descubrimiento de Agote fue un aporte científico de gran relevancia para la humanidad, revolucionando la medicina transfusional. Esta innovación permitió la creación de bancos de sangre y facilitó el desarrollo de la hemoterapia, una especialidad médica fundamental para la realización de trasplantes y tratamientos de enfermedades complejas. La capacidad de realizar transfusiones seguras abrió la puerta a intervenciones médicas que hoy son cotidianas y que salvan millones de vidas en todo el mundo.
En reconocimiento a este logro, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires promulgó en 2003 la Ley 1.038, instituyendo el 9 de noviembre como el Día del Donante Voluntario de Sangre y Hemocomponentes, y añadiendo esta fecha al calendario escolar para fomentar la conciencia y el compromiso social. Un año después, en 2004, se sancionó la Ley Nacional 25.936, que extendió la conmemoración a todo el territorio nacional, estableciendo oficialmente el Día Nacional del Donante Voluntario y Habitual de Sangre.