
El precio de una bandera: por qué Faustino Oro podría dejar de jugar para Argentina por sólo 5000 euros
El acceso a la élite del ajedrez conlleva un fuerte esfuerzo económico; los jóvenes son tentados porque la legislación vigente no contempla sus procesos formativos. El "Messi del ajedrez", que viene de ganarle a Carlsen, un caso seductor.
Actualidad04 de abril de 2024 I24Faustino, al igual que otros argentinos, como los casos de Ilan Schnaider (de 12 años) o los hermanos Fiorito (Joaquín, de 16 y Francisco, de 13 -ellos están radicados junto a sus padres en Canarias), y decenas de otros jóvenes ajedrecistas de diversas nacionalidades, entre las que sobresalen India, Rusia, China, Turquía, Kazajistán y Uzbekistán, libran duras batallas para sumar puntos en el ranking; ellos corren detrás del sueño de todo deportista: primero, pertenecer al grupo de la élite y segundo, ser campeón mundial. La vara es muy alta y además, el precio que se paga es muy alto.

Acaso, como nunca antes, el mundo del ajedrez ha tenido un crecimiento en popularidad tan significativo como el sucedido en los últimos cuatro años. Su rápida adaptación a la era digital provocó no sólo un aumento de sus practicantes y una más fácil comprensión en la metodología de su aprendizaje, sino que, además, su versatilidad atrajo la atención de los más pequeños. Así, miles de chicos y chicas, cada vez más jóvenes, viajan por el planeta dejando su sello con plusmarcas o alcanzando cada día resultados más sorprendentes. El niño argentino Faustino Oro, de 10 años, es uno de los más emblemáticos.
Según el "Handbook" -el reglamento de la FIDE-, hay una tabla con los siguientes valores de compensación que una federación (la nueva) debería pagar a la otra (la de origen). Son los siguientes: el costo de un pase de un ajedrecista con 2700 puntos de Elo o más (los 40 mejores del mundo) a otra federación tiene un costo de 50.000 euros; con 2600 puntos, 30 mil, con 2500 puntos, 10 mil, con 2400 puntos, 6 mil, y con 2300, 4 mil. ¿Y los niños? La FIDE percibe un canon por cada transferencia; si el jugador posee el título de gran maestro recibe 5000 euros, por un maestro internacional, 2 mil, y un Maestro FIDE, 1 mil.
De acuerdo a esta tabla, hoy, una de las mayores promesas del ajedrez argentino, Faustino Oro podría dejar la representación argentina por un valor aproximado de 5000 euros. Todo un negocio de inversión para el mundo del marketing. Obviamente que la decisión final la tomará el jugador, o en este caso como en otros, será un juicio de los padres. Pero la posibilidad está al alcance de la mano. El tema es que los más jóvenes, los que aún no escalaron a la cima, no tienen títulos de grandes maestros y se perfilan como grandes estrellas del futuro inmediato, son bocados tentadores para el inversionista o el dirigente sin escrúpulos.


El Municipio de Río Gallegos participó de la asunción del nuevo comandante de la XI Brigada Mecanizada

El empresario argentino Enrique Shaw será proclamado beato por el Vaticano

La Caja de Servicios Sociales garantiza la atención durante el verano en toda la provincia

Santa Cruz participó de la reunión de la OFEPHI y pidió revisar cambios regulatorios


Hospital de Río Turbio: la obra de la sala de tomografía presenta un 80 por ciento de avance


El Gobierno apura el dictamen por la Ley de Glaciares y la oposición amenaza con judicializar
El oficialismo activó las comisiones para avanzar con la reforma de la Ley de Glaciares, mientras la oposición anticipa un conflicto judicial.




