Estados Unidos incautó un segundo buque petrolero frente a Venezuela y profundiza la presión sobre Maduro
Estados Unidos incautó un segundo buque petrolero frente a las costas de Venezuela, en el marco del endurecimiento de las sanciones impulsadas por el presidente Donald Trump contra el régimen de Nicolás Maduro. La operación, confirmada por funcionarios estadounidenses, fue llevada adelante por la Guardia Costera y forma parte del “bloqueo total” anunciado por la Casa Blanca contra las embarcaciones que transporten crudo vinculado al chavismo.
La nueva incautación se suma a la del petrolero Skipper, confiscado días atrás, y se inscribe en una estrategia destinada a asfixiar la principal fuente de ingresos del régimen venezolano: el petróleo. Analistas señalan que cada buque interceptado representa una fuerte pérdida de divisas y complica el esquema de exportaciones irregulares, en un contexto donde cerca del 40% de los tanqueros que operan en puertos venezolanos lo harían fuera de la normativa internacional.
El impacto de estas medidas ya se refleja en una marcada caída de la actividad en los principales puertos petroleros y en el repliegue de embarcaciones que evitan la región por temor a ser interceptadas. Economistas advierten que una reducción sostenida de los envíos podría profundizar la crisis económica venezolana, mientras crece la tensión política y militar en el Caribe ante la posibilidad de nuevas acciones de Washington.