Economía Por: SS22 de septiembre de 2025

En 19 meses se perdieron 15.302 empresas: 219.256 trabajadores afectados

La gestión económica del gobierno de Javier Milei, marcada por su política de "motosierra" y un severo ajuste fiscal, ha dejado una profunda huella en el mercado laboral argentino. Según datos recientes de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT), la caída del empleo formal y el cierre de empresas son una cruda realidad que se refleja en las estadísticas oficiales.

Empleo y empresas en retroceso

El panorama es claro y alarmante. Desde noviembre de 2023, mes que sirve como referencia para la asunción del nuevo gobierno, hasta junio de 2025, el país ha perdido 219.256 trabajadores registrados. La cifra, que surge de un análisis del seguro de riesgos de trabajo obligatorio, muestra un duro revés para la economía.

Pero la crisis no solo afecta a los trabajadores; también impacta en el tejido productivo. En ese mismo período, 15.302 empleadores (empresas, organismos o entidades que generan puestos de trabajo) desaparecieron. Este declive, que se aceleró en los primeros meses de 2024 a causa de la devaluación y la parálisis de la obra pública y privada, demostró que la "motosierra" afectó directamente la vitalidad del sector productivo.

Los sectores más golpeados

La caída del empleo no fue pareja en todos los rubros. El sector público, la construcción y la industria manufacturera se llevaron la peor parte.

  • Administración pública, defensa y seguridad social obligatoria: Con una reducción de 89.794 puestos, este sector fue el más afectado por los retiros voluntarios y cesantías impulsadas por las políticas de ajuste.
  • Construcción: La paralización de la obra pública dejó sin trabajo a 81.463 personas. La falta de inversión del Estado se sintió con fuerza en este sector.
  • Servicios de transporte y almacenamiento: Perdió 53.101 empleos, un reflejo de la contracción general de la actividad económica.
  • Industria manufacturera: Sufrió la pérdida de 43.063 puestos de trabajo, un indicador de la caída de la producción y el consumo.

Estos datos, analizados por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), confirman que la falta de consumo, la caída de los ingresos de las familias y el aumento de los costos de servicios esenciales (luz, gas, prepagas) crearon un cóctel explosivo que ahogó la actividad económica y derivó en el cierre de miles de empresas y la pérdida de cientos de miles de empleos.

¿Podrá el gobierno de Milei revertir esta tendencia y generar el crecimiento que prometió? La pregunta queda flotando en un contexto de incertidumbre económica y social.