EE.UU. y Colombia alcanzan acuerdo sobre deportaciones y evitan sanciones económicas

Tras días de tensas negociaciones, la Casa Blanca y el gobierno colombiano anunciaron un acuerdo que pone fin a la disputa por la repatriación de migrantes colombianos desde Estados Unidos. Como parte del pacto, Colombia aceptará sin restricciones a los deportados, que serán trasladados en aviones militares estadounidenses. A cambio, el gobierno de Donald Trump suspenderá los aranceles previstos sobre las exportaciones colombianas, aunque mantendrá restricciones de visado a altos funcionarios hasta que se cumplan los términos establecidos.

El canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, destacó que el país garantizará condiciones dignas para los ciudadanos repatriados. Por su parte, Trump reafirmó su compromiso con la soberanía de EE.UU. y aseguró que continuará presionando a otras naciones para que colaboren en la deportación de migrantes ilegales. El acuerdo también pone en pausa medidas arancelarias que incluían un aumento de hasta el 50% sobre productos colombianos.

A pesar del entendimiento, el uso de aviones militares y las condiciones de deportación generaron críticas, tanto dentro como fuera de Colombia. A nivel regional, líderes como Xiomara Castro, de Honduras, expresaron su apoyo a Colombia en esta controversia. Con Estados Unidos como principal socio comercial, el acuerdo busca evitar una escalada que podría haber afectado sectores clave como el petróleo, el café y las flores.