El italiano Leonardo Bertulazzi, ex integrante del grupo terrorista Brigadas Rojas, fue detenido ayer jueves en Buenos Aires durante un operativo conjunto entre autoridades locales e Interpol. Bertulazzi, quien se encontraba refugiado en Argentina desde 2002, es buscado por la justicia europea por su participación en diversos crímenes, incluyendo el secuestro del ex primer ministro italiano Aldo Moro en 1978.
La captura de Bertulazzi, realizada en su domicilio de la Ciudad de Buenos Aires, fue el resultado de un trabajo de inteligencia coordinado por el Ministerio de Seguridad de la Nación, junto a la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal, el Ministerio de Justicia y la Vicejefatura de Gabinete del Interior. Su estatus de refugiado, otorgado por la Comisión Nacional de Refugiados (CONARE), había sido recientemente revocado, lo que permitió su detención y posible extradición a Italia.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó su "profundo agradecimiento" al gobierno argentino por la detención de Bertulazzi, condenado en Italia a 27 años de prisión por delitos de terrorismo. Por su parte, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, destacó en sus redes sociales que con esta captura “se le terminaron los años de impunidad” a Bertulazzi.
La investigación permitió el secuestro de armas de guerra de juguete, réplicas, documentos de planificación de un tiroteo y simbología neonazi.
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