Un devastador ataque terrorista golpeó Moscú el viernes por la tarde, dejando al menos 40 personas muertas y cerca de un centenar de heridos en el Crocus City Hall, una conocida sala de conciertos. Tres hombres armados irrumpieron en el recinto antes de un espectáculo, abriendo fuego contra los asistentes y lanzando bombas molotov que desataron un incendio. Los desgarradores momentos fueron capturados en videos que mostraban a una multitud aterrada tratando de escapar del lugar.
Las operaciones de rescate se llevaron a cabo de manera urgente, con bomberos evacuando a alrededor de 100 personas del sótano y desplegando equipos de elevación para rescatar a los atrapados en el techo. La policía identificó el vehículo utilizado por los atacantes y estableció un cordón de seguridad debido a posibles artefactos explosivos.
El Kremlin calificó el acto como un "horrible ataque terrorista", mientras que el país se encuentra en estado de conmoción y luto. Las autoridades continúan investigando para esclarecer los detalles del ataque y brindar justicia a las víctimas y sus familias.
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El Papa Francisco emitió un "llamamiento urgente" hoy, instando a detener cualquier acción violenta que pueda llevar a un conflicto aún mayor en Oriente Medio, en medio de la creciente tensión tras el ataque de Irán a Israel.
