Llegó al Aeropuerto de Ezeiza el vuelo con los 10 argentinos deportados desde los Estados Unidos
A las 03:17 de la madrugada de este jueves aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, el vuelo proveniente de los Estados Unidos con los 10 pasajeros argentinos deportados por el Gobierno de Estados Unidos. Todos ingresaron por la terminal privada y poco después se rencontraron con sus familiares.
El traslado se hizo en un avión de la empresa Omni Air International, un Boeing 767-300 con capacidad para 247 pasajeros, que la administración estadounidense rentó para llevar a cabo el procedimiento.
En las afueras del aeropuerto Ministro Pistarini, se encontraba trabajando la Policía Federal Argentina y la Policía de Seguridad Aeroportuaria, aunque no fueron necesarios procedimientos de seguridad. La salida de cada uno de los individuos se fue haciendo de manera paulatina, algunos con valijas y otros con algunas pertenencias en bolsas blancas.
Uno de los pasajeros contó que el trato durante los días previos a comenzar con el trámite de deportación fue muy bueno. “Todo en orden, como debe ser”, indicó. El joven de 25 años, a quien atraparon en San Antonio, Texas, dijo que no podrá regresar al país norteamericano por un lapso de cinco años. Respecto a la situación que los llevó a emigrar, aseguró: “Solamente vamos por el sueño americano”. Además, confirmó que la Cancillería trabajó para que los traslados pudieran hacerse de manera ordenada.
Los deportados que aterrizaron en suelo argentino son:
Daniel Rodrigo Céspedes (Robo)
Maximiliano García (Sin antecedentes)
Luciana Lorena Lopresti (Agresión)
Sandra Márquez (Sin antecedentes)
Ernesto Nunez (Sin antecedentes)
Marcos Ontivero (Procurar prostitución)
Pablo Ridolfo (Delitos contra el orden público)
Mario Robles (Sin antecedentes)
Julián Francisco Rojas (Sin antecedentes)
Rodolfo Valor (Tráfico)
El embajador argentino en Estados Unidos, Alejandro Oxenford, relativizó el impacto de las recientes deportaciones. En declaraciones radiales aseguró que “el número argentino es infinitésimo” en el contexto regional y remarcó que Argentina se encuentra entre los países con menores casos de expulsión por parte de las autoridades estadounidenses.
Al referirse al vuelo que arribó a Ezeiza, el funcionario remarcó que el volumen de argentinos afectados es marginal respecto de la cifra total de extranjeros alcanzados por las medidas. “Estamos hablando como que te diga un millón y diecisiete. Es más o menos cero”, señaló. Según explicó, las deportaciones obedecen a violaciones de la legislación local y pueden abarcar desde delitos penales hasta infracciones migratorias. “Es una potestad de cada país decidir qué hacer con las personas que violan la ley dentro de su territorio”, detalló Oxenford.
“Nosotros asistimos con todo el cuidado que, por supuesto, siempre merecen todos los ciudadanos argentinos. Siempre lo hemos hecho así y lo seguimos haciendo. Lo otro que puedo decir es que no ha habido incidentes”, agregó.