El Gobierno trabaja en una reforma jubilatoria y pospone su presentación hasta 2026
El Gobierno nacional acordó con el Fondo Monetario Internacional avanzar en una reforma jubilatoria que garantice la sostenibilidad del sistema previsional y contribuya al ancla fiscal del programa económico. Aunque la iniciativa ya está en preparación, se postergó su envío al Congreso hasta diciembre de 2026, con el argumento de que se trata de un rediseño complejo que requiere un amplio consenso político. El FMI consideró que esta reforma es una de las metas estructurales más importantes del acuerdo vigente y valoró la decisión de mantener el bono a los jubilados más vulnerables.
Como primer paso hacia ese objetivo, el Ejecutivo dio por finalizada la moratoria previsional a fines de marzo. En un informe reciente al Congreso, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, explicó que esa medida debe interpretarse dentro de un proceso más amplio de revisión de la seguridad social. Señaló que las moratorias nacieron como una respuesta excepcional a problemas estructurales del mercado laboral, pero su uso sostenido terminó convirtiéndolas en una vía permanente de acceso a la jubilación sin aportes suficientes, afectando la equidad y sostenibilidad del sistema.
Pese a la eliminación de la moratoria, el Gobierno aseguró que continúa vigente la posibilidad de regularizar aportes para quienes estén a menos de 10 años de la edad jubilatoria. Según cifras oficiales, desde la creación de la moratoria en 2023, accedieron al beneficio más de 580.000 personas, de las cuales el 62% son mujeres. Además, más de la mitad de los actuales jubilados y pensionados del SIPA obtuvieron su haber a través de alguna moratoria, lo que implicó un gasto mensual del 2,57% del PBI a fines de 2024.