Política Redacción I24 12 de enero de 2025

IMPSA, la primera privatización de la era Milei, abre paso a nuevos traspasos de empresas estatales

El gobierno de Javier Milei avanza con la primera privatización de su mandato: la venta de la histórica metalúrgica IMPSA a la estadounidense ARC Energy. El proceso, que aún depende de la renegociación de una deuda superior a los USD 570 millones, marca un giro estratégico en la política económica. Los nuevos dueños, vinculados al expresidente estadounidense Donald Trump, planean enfocar la empresa en sectores clave como la energía nuclear, el sector portuario y la provisión de insumos hidroeléctricos. Sin embargo, el futuro de los 700 trabajadores de la compañía aún genera incertidumbre.

El Ministerio de Economía justificó la privatización como parte de los objetivos de déficit cero y la eliminación del uso de recursos federales en empresas estatales. Con esta lógica, el gobierno ya tiene en la mira otras privatizaciones, entre ellas las de Aysa, Enarsa e Intercargo. Estas medidas buscan reducir el peso del Estado, aunque generan preocupación por el impacto social y económico, particularmente en términos de empleo.

El traspaso de IMPSA simboliza más que un cambio de propietario; refleja un modelo económico enfocado en abrir sectores estratégicos al capital privado. No obstante, el proceso ha generado interrogantes sobre las condiciones laborales, la soberanía energética y las implicancias políticas de estos vínculos internacionales. La próxima semana será decisiva para definir el futuro de esta emblemática empresa argentina.