Actualidad I24 30 de abril de 2024

Una obra de caminería pone en peligro un Tesoro Natural en Salta

En la pintoresca localidad de Tolar Grande, a 378 kilómetros de la ciudad de Salta, un fenómeno desconcertante está causando preocupación entre los habitantes y los amantes de la naturaleza. Los llamados "ojos de mar", que antes lucían un hermoso color turquesa, ahora exhiben un tono marrón preocupante.

Este cambio drástico en el color del agua ha desatado una serie de investigaciones para determinar la causa de este fenómeno y evaluar su impacto en el ecosistema único que albergan estos cuerpos de agua salada. Se especula que la construcción de pasarelas, destinadas a permitir a los turistas caminar entre las pequeñas lagunas, podría estar detrás de este desafortunado suceso.

Los "ojos de mar" son más que simples lagunas: son depósitos de estromatolitos, fósiles vivos de bacterias y algas que desempeñaron un papel crucial en la formación de la vida en la Tierra. Estos estromatolitos son los registros fósiles más antiguos del planeta y se consideran verdaderos tesoros de la evolución.

La Universidad Nacional de Salta (UNSa) está llevando a cabo una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas de este cambio en la coloración del agua y para evaluar si los estromatolitos aún sobreviven en este entorno modificado. Sin embargo, los resultados aún están pendientes, ya que se necesita más información y acceso a los sitios de estudio.

Mientras tanto, desde el Ministerio de Producción y Desarrollo Sostenible de la provincia de Salta, se menciona que hay dos estudios en curso, uno encargado por el municipio de Tolar Grande y otro por ellos mismos, ambos realizados por especialistas de la UNSa. Sin embargo, se enfatiza que las aguas turbias podrían ser simplemente un efecto del viento, aunque esta explicación no parece ser suficiente para tranquilizar a los preocupados investigadores y ciudadanos.

La incertidumbre persiste mientras se espera la autorización para continuar con las investigaciones y se aguarda con ansias el veredicto final sobre el destino de estos valiosos estromatolitos. Mientras tanto, la comunidad científica y los defensores del medio ambiente continúan vigilando de cerca este delicado equilibrio entre el desarrollo humano y la preservación de la naturaleza en uno de los rincones más cautivadores de Salta.